Durante mucho tiempo me han pedido que hable sobre un fenómeno que, aunque parece técnico, tiene implicaciones profundas en el desarrollo cultural, empresarial y comunitario de nuestra ciudad y, posiblemente, también en muchas otras ciudades, estados e incluso países: la falta de posicionamiento digital de eventos, proyectos y logros locales en los motores de búsqueda como Google. Y hoy, después de vivirlo en primera persona a lo largo de años de trabajo organizando eventos, colaborando con media partners y apareciendo en publicaciones, siento la necesidad de compartir una reflexión sincera. A pesar del valioso respaldo recibido por medios que trabajan con entrega, profesionalismo y gran vocación comunitaria, la visibilidad real en Internet no corresponde al impacto de esos esfuerzos en cuanto a búsqueda en Google. Cuando alguien busca en Google el nombre de un evento, de una organización o incluso de un entrevistado, en muchos casos no aparece nada relevante o actual, lo cual resulta llamativo y preocupante para cualquier comunidad que aspira a consolidar su crecimiento cultural y económico.
Las causas técnicas de este problema son diversas y, posiblemente, responden a factores estructurales. En primer lugar, podría deberse a que muchos medios locales no cuentan con una estructura digital robusta; sus sitios web quizás no estén completamente optimizados para motores de búsqueda, lo que implicaría que, aunque publiquen contenido, Google no los indexa adecuadamente o los considera de baja relevancia frente a fuentes de mayor autoridad. Otra posible causa es que algunos medios no estén inscritos o verificados en plataformas como Google News Publisher Center, limitando así su exposición en resultados destacados, aunque esto no puede asegurarse en todos los casos. Adicionalmente, podría influir la falta de estrategias de SEO en el contenido publicado: si las notas carecen de palabras clave pertinentes, etiquetas de metadatos o enlaces cruzados, su capacidad de posicionamiento disminuye notablemente. También es probable que la escasez de referencias externas o backlinks —sitios que citen o enlacen esas noticias— afecte negativamente su autoridad digital. Por último, puede observarse una carencia general de estrategias de posicionamiento personal o institucional que permitan consolidar la presencia de quienes generan valor cultural y empresarial en sus comunidades.
Además, es importante reconocer que no todo el contenido que se transmite en formatos tradicionales —como la radio, programas en vivo o incluso podcasts— necesariamente se traduce en posicionamiento digital automático. Una emisora o un programa puede tener su público cautivo y ser exitoso en términos de audiencia directa, pero si no se genera un contenido escrito, estructurado y optimizado en una página web o en plataformas indexadas, Google no podrá reconocer ni posicionar esa información. Por ejemplo, si una entrevista realizada en un programa de radio o podcast se queda únicamente en audio y no se acompaña de un resumen escrito en una web bien estructurada, con etiquetas adecuadas y palabras clave, es probable que pase desapercibida en los motores de búsqueda. En cambio, si esa misma entrevista se transforma en una nota de blog, en una noticia publicada en un sitio web optimizado o en una entrada en Google News, entonces sí se convierte en un activo visible y posicionable digitalmente. Por eso, diferenciar entre el impacto real de transmisión (radio, podcast) y el impacto digital estratégico (SEO, redes, web) resulta crucial para que los esfuerzos de difusión sean reconocidos y amplificados en Internet.
Hoy más que nunca, no basta con realizar eventos o proyectos de calidad; es fundamental construir una huella digital que asegure su permanencia y visibilidad en un mundo interconectado. Esta reflexión no busca señalar culpables, sino plantear una realidad que merece ser atendida, y hacer entender que por esta razón accedí a reflexionar sobre este tema, con la intención de aclarar dudas y criterios, siempre con el objetivo de fortalecer el crecimiento, reconocer el esfuerzo y respetar el trabajo de todos los que forman parte de los medios y las iniciativas locales. Además, es un llamado a la atención para seguir colaborando y sumando esfuerzos, porque en la unión está la fuerza. Este ha sido siempre mi lema: reconocer que en pueblos y ciudades más pequeñas, la clave del crecimiento está en el apoyo mutuo y en aprender juntos las técnicas y los caminos correctos que nos permitan elevarnos cada día más. El posicionamiento en los motores de búsqueda no es un privilegio, es parte esencial de cualquier proyecto contemporáneo que aspire a dejar huella. Mi deseo es que esta conversación sirva como punto de partida para que cada organización, medio y creador considere la importancia de ser visto, escuchado y valorado no solo localmente, sino también globalmente.
R.M